Sibila Camps presentará el libro “Tucumantes. Relatos para vencer al silencio”
En el marco de los 30 años de Radio Universidad, este jueves a las 20, en el Centro Cultural Virla (25 de Mayo 265) se llevará a cabo la presentación del libro “Tucumantes. Relatos para vencer al silencio”, de la periodista Sibila Camps.
La actividad es organizada por la Secretaría de Gestión y Comunicación Institucional del Rectorado a través de la emisora fundada en 1989.
Sibila Camps es una periodista y escritora argentina, docente en periodismo, y especialista en cobertura y comunicación sobre desastres. Se desempeñó en varios medios gráficos, y hasta mayo de 2013 en el diario Clarín, donde trabajó durante 30 años. Desde fines de 2008 integra la red PAR (Periodistas de Argentina en Red – por una comunicación no sexista, conformada por más de 150 profesionales de quince provincias.
Sobre Tucumantes
Un ex montonero pasó 33 años durmiendo sobre cadáveres. Quebrado por la tortura y luego obligado a trabajar en la Jefatura de Policía de Tucumán, logró sacar numerosos documentos que dan cuenta de secuestros, tormentos y asesinatos cometidos por los represores. Los ocultó en su cama de mampostería y recién en 2010 se atrevió a entregarlos a la justicia. Allí estaba la primera lista de desaparecidos elaborada por los propios genocidas que se conoció en toda la Argentina.
Sibila Camps abre este libro con la pregunta que le dio origen: ¿cómo hizo ese hombre para vivir más de tres décadas durmiendo sobre los cadáveres? Un interrogante que la llevó a profundizar en las historias inconclusas y en las heridas sin cerrar que dejó el arrasamiento perpetrado durante casi nueve años por el Estado terrorista.
Surgió así el caso de un joven al que le cambiaron dos veces el apellido sin que le llamara la atención. La casa donde vivía Diana Oesterheld en Tucumán, usurpada por una mujer policía durante 33 años. Cuatro pueblos fundados por el Ejército que perpetúan el relato de los represores. El Paseo de la Independencia de Famaillá, que cuenta la historia con un estilo infantil y omite lo ocurrido en La Escuelita, el primer centro clandestino de detención del país, que siguió dictando clases hasta 2016.